El príncipe

Capítulo I
Cuántas clases de principados hay, y de qué modo ellos se adquieren.
Capítulo II
De los príncipes hereditarios.
Capítulo III
De los principados mixtos.
Capítulo IV
Por qué ocupado el reino de Darío por Alejandro, no se rebeló contra los sucesores de éste después de su muerte.
Capítulo V
De qué modo deben gobernarse las ciudades o principados que, antes de ocuparse por un nuevo príncipe, se gobernaban con sus leyes particulares.
Capítulo VI
De las soberanías nuevas que uno adquiere con sus propias armas y valor.
Capítulo VII
De los principados nuevos que se adquieren con las fuerzas ajenas y la fortuna.
Capítulo VIII
De los que llegaron al principado por medio de maldades.
Capítulo IX
Del principado civil.
Capítulo X
Cómo deben medirse las fuerzas de todos los principados.
Capítulo XI
De los principados eclesiásticos.
Capítulo XII
Cuántas especies de tropas hay; y de los soldados mercenarios.
Capítulo XIII
De los soldados auxiliares, mixtos y propios.
Capítulo XIV
De las obligaciones del príncipe en lo concerniente al arte de la guerra.
Capítulo XV
De las cosas por las que los hombres, y especialmente los príncipes, son alabados o censurados.
Capítulo XVI
De la liberalidad y miseria (avaricia).
Capítulo XVII
De la severidad y clemencia, y si vale más ser amado que temido.
Capítulo XVIII
De qué modo los príncipes deben guardar la fe dada.
Capítulo XIX
El príncipe debe evitar ser despreciado y aborrecido.
Capítulo XX
Si las fortalezas y otras muchas cosas que los príncipes hacen con frecuencia son útiles o perniciosas.
Capítulo XXI
Cómo debe conducirse un príncipe para adquirir alguna consideración.
Capítulo XXII
De los secretarios (o ministros) de los príncipes.
Capítulo XXIII
Cuándo debe huirse de los aduladores.
Capítulo XXIV
¿Por qué muchos príncipes de Italia perdieron sus estados?
Capítulo XXV
Cuánto dominio tiene la fortuna en las cosas humanas, y de qué modo podemos resistirle cuando es contraria.
Capítulo XXVI
Exhortación a librar la Italia de los bárbaros.